Desde la apertura del congreso para partners de Red Hat en Valencia en la intervención del CEO Jim Whitehurst tengo una de sus frases dándome vueltas en la cabeza. Esta era referente a la «experiencia de usuario«, y cómo comenté en el post anterior, hacía referencia a que los usuarios tienen una experiencia de usuario superior en sus casas a la que tienen en sus trabajos. Y esto supone una transformación bastante importante y que nos debe hacer reflexionar. Hace unos años los ordenadores del trabajo, las aplicaciones que se utilizaban, la conexión a internet o telefonía eran muy superiores en el entorno de trabajo, pero eso poco a poco y en una gran parte de los casos ha ido cambiando: la gente no sòlo dispone en muchos casos de mejor equipamiento en casa, sino que sus aplicaciones son mucho más amigables y potentes.
Un caso muy sencillo viene con las aplicaciones de Google cómo el correo, el calendario, el chat, los documentos compartidos, etc… que podemos usar en todos lados incluso en el móvil y que obligan a las empresas a realizar un gran desembolso para intentar igualar, muchas veces sin éxito, las posibilidades que nos ofrece. De ahí el impulso que le está dando Google a que las empresas se pasen a utilizar sus aplicaciones en versión Pro. Pero todo esto va mucho más allá, la gente está empezando a acostumbrarse a tener potentes redes de comunicación y cooperación a su alcance: Facebook, Twitter, Skype y muchos otros, que tienen una adopción más lenta o nula dentro de la empresa. Sin duda todo esto es un reto para los desarrolladores de aplicaciones y los proveedores de servicios que de repente se dan cuenta que tienen que competir en un mercado global en el que el usuario ya está acostumbrado a utilizar lo mejor de lo mejor. Interesante reto.
Pero volvamos al campo del software libre, el objetivo de mejorar la mentada experiencia de usuario no para de sonar por todas partes. Basta con leer las últimas entradas del blog de Mark Shuttleworth, todas ellas referidas a las mejoras en usabilidad y en la interfaz de usuario que se están planteando para Ubuntu, para darse cuenta que tenemos un reto difícil frente a nosotros: conseguir la mejor experiencia de usuario posible.
La apariencia de la recien nacida Lucid está causando gratas impresiones en todo el mundo que la prueba, sin haber llevado a cambio muchos cambios revolucionarios. Eso sí, resulta que con el más grande de ellos: el cambio de posición de los botones en las ventanas a la parte izquierda, se está sufriendo un mayor rechazo, lo que de nuevo nos muestra la complejidad de los cambios de interfaz y de que estos sean aceptados por la gente. Quizá por ello y porque todavía no está 100% terminada no se ha incluido la interfaz de gnome 3: gnome-shell en esta última versión de Ubuntu, que además es una LTS (long time-support), pero con un poco de suerte se incluya en la siguiente release, ya que tiene muy buena pinta.
Eso sí, debemos asumir que aquí tenemos un gran rival, que lleva muchos años de ventaja, ofreciendo la que según muchos es la mejor experiencia de usuario, no sólo en el escritorio sino en muchos de sus dispositivos móviles: Apple. Con una cuota cada vez más amplia del mercado doméstico ha sabido interpretar hace tiempo que los productos entran por los ojos y ha sabido hacer sentirse cómodos a sus usuarios con lo que ha ido consiguiendo una fidelidad casi sectaria entre sus crecientes huestes.
El otro día comentando con acs que tal le había ido en el encuentro de desarrolladores de dispositivos móviles salía el tema del enfrentamiento iPhone vs Android y cómo aunque este último cada vez le va comiendo más terreno al iPhone, Apple tiene cierta ventaja a la hora de unificar su experiencia de usuario ya que controla tanto la plataforma hardware cómo software y esto hace más fácil el diseño y el desarrollo. Aún así las políticas draconianas en el control de aplicaciones que está ejerciendo la compañía de la manzana juegan en su contra, así cómo la flexibilidad de plataforma que tiene Android hace que los fabricantes de móviles cada día apuesten más por ella lo que se traduce en un aumento en el número de desarrolladores y en una evolución más rápida del hardware.
Todo un mundo, para nada nuevo, este de la experiencia de usuario, que cada día va teniendo más peso en todos los frentes y que debemos tener más en cuenta si cabe. Y sino que se lo digan a Google que ha modificado últimamente la interfaz de su santo grial: el buscador, incluyendo nuevos elementos cómo la barra lateral. Pues no nos queda otra, todos a seguir dándole vueltas…